La casa del loco

Se trata de una de esas casas viejas, muy viejas, con carácter. Una de esas casas en donde un ángulo recto es de 85 o 97 grados y hablando de ángulos, dentro y fuera de la casa no existe ninguno de estos que no este repujado o tallado, al igual que sus muebles, columnas, escaleras y paredes.

Su diseñador fue un tal Karl Junker, carpintero de oficio y estudiante en la academia de arquitectura y bellas artes de Munich.

La casa fue edificada en 1891 y a partir de ese día, Karl Junker se encargo de diseñar y modificar todo su interior y exterior.

Muchas leyendas se ciernen sobre el, la mas particular es la de que a la espera de una novia, que jamas regreso de un viaje a Holanda, se dedico hasta su muerte en 1921, a crear una casa para una familia incluyendo habitaciones y artefactos para niños.

Este echo le hizo ganar en su pueblo, pequeño y sencillo, adjetivos como loco, excéntrico o perturbado. En realidad quizás se trate de que dentro de su creatividad, Karl Junker olvidase su entorno.

De cualquier forma al efectuar el recorrido de la casa, buscándole quizás el origen a la fuerza de inspiración de su creador, creo que es más conveniente pensar en la leyenda de la novia, que a pesar de ser solo una leyenda, da más fuerza a la obra que pensando en un loco.